Ayuntamiento de Madrid y el Ministerio acuerdan la segunda fase del soterramiento de la A-5
El Ayuntamiento de Madrid y el Ministerio de Vivienda y Agenda Urbana han firmado un convenio para llevar a cabo el soterramiento del segundo tramo de la A-5, una obra clave para la transformación del suroeste de la capital. Este nuevo tramo se extenderá hasta la avenida de la Aviación, conectando con el túnel de la primera fase, actualmente en desarrollo hasta la avenida del Padre Piquer.
El proyecto será financiado en un 75% por el Ayuntamiento de Madrid, mientras que la Entidad Pública Empresarial de Suelo (SEPES) asumirá el 25% restante, con un tope de 146,25 millones de euros. En caso de que el coste final de la obra supere esta cantidad, será el Consistorio madrileño el que se haga cargo del exceso.
El acuerdo también detalla el calendario de pagos por parte de SEPES: un 35% del importe se abonará en el momento de la licitación, un 40% cuando se haya certificado el 75% de la obra y el 25% restante en el momento en que el túnel entre en servicio. Además, SEPES cubrirá hasta tres millones de euros en honorarios para la redacción del proyecto, cuyo anteproyecto ya ha sido adjudicado.
Inicio de las obras en un plazo máximo de 24 meses
El convenio establece que los trabajos de soterramiento deberán comenzar en un plazo máximo de dos años desde la aprobación definitiva del proyecto. Para garantizar su correcta ejecución, se creará una comisión de vigilancia y control.
Esta segunda fase del soterramiento de la A-5 es una pieza clave en el desarrollo del nuevo barrio de Campamento, definido por el Ayuntamiento como "el mayor proyecto de regeneración urbana de la ciudad de Madrid". Se trata de una operación de gran envergadura a nivel estatal, tanto por su impacto como por su extensión, donde SEPES tiene previsto construir hasta 10.700 viviendas.
En julio, SEPES presentó la iniciativa urbanística de Campamento para su tramitación en el Ayuntamiento de Madrid, y el 24 de septiembre fue aprobada en Pleno. Ahora, con la firma de este convenio, el proyecto avanza hacia la transformación de los antiguos cuarteles en un nuevo barrio con infraestructuras modernas y mayor conectividad.
Desde el Ministerio de Vivienda y SEPES destacan que esta actuación supone la recuperación de una gran superficie de suelo público que había quedado en desuso, favoreciendo el acceso a la vivienda y contribuyendo al reequilibrio territorial de Madrid.
En total, el 25% del suelo disponible se destinará a la construcción de viviendas, mientras que el 75% restante albergará viales, zonas verdes y espacios públicos, configurando un entorno que busca mejorar la calidad de vida de los futuros residentes y la integración de esta nueva área con el resto de la ciudad.
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