Madrid se descubre ante Ruiz-Giménez, primer Defensor del Pueblo

La alcaldesa de Madrid, Ana Botella, ha ensalzado este lunes la figura del que fuera primer Defensor del Pueblo de la democracia, Joaquín Ruiz-Giménez, de quien ha elogiado su voluntad de diálogo y su generosidad "sin límites", como "gran hombre de Estado".

Botella ha hecho estas afirmaciones en el descubrimiento de una placa conmemorativa, dentro del Plan Memoria del Ayuntamiento de Madrid, en honor al que también fue Ministro de Educación, fallecido hace cuatro años.

"Ruiz-Giménez soñó y luchó por una España unida en la diversidad, donde todos cupiéramos sin sectarismos", ha asegurado la alcaldesa, antes de añadir que el primer Defensor del Pueblo de la democracia enseñó "la teoría y la práctica" de ésta.

Del mismo modo, Botella ha ensalzado la educación "exquisita" de un hombre "cordial" y "conciliador", que abogó por la "paz" y el "diálogo".

"Ministro, abogado, catedrático, embajador, político y, sobre todo, persona tolerante y justa", así ha definido Botella a quien "engrandeció" Madrid, la ciudad que "tanto lo amó" durante los años de la transición.

Como presidente del Comité español de Unicef, ha recordado la alcaldesa de Madrid, marcó un "camino de avances sin vuelta atrás".

En este sentido, Ruiz-Giménez fue, a juicio de Botella, un español "admirable", que dejó una "profunda huella personal", gracias a su compromiso con la infancia y con los refugiados, a través de Unicef.

Asimismo, Botella ha destacado los valores de "justicia", "tolerancia" y "libertad" del primer Defensor del Pueblo, así como su "talla humana y política", y su "brillante" trayectoria.

Como "espejo" de la dignidad y de la tolerancia, tuvo la "grandeza" de "Sumar y no restar" en los momentos "difíciles", ha afirmado la alcaldesa de Madrid.

En la inauguración, también ha estado presente el exconcejal Juan Antonio Gómez Angulo, quien ha destacado la faceta como catedrático del que fuera Ministro de Educación, quien, además, exigió "estricta intimidad" y flores en forma de donaciones a oenegés para su funeral, ha rememorado la alcaldesa.

Además, ha apostillado, fue un joven miembro de la corporación municipal del Madrid que trataba de "salir adelante" tras la "tragedia" de la Guerra Civil.

Como una de las figuras más "relevantes" de la vida política y cultural española de la segunda mitad del Siglo XX, dedicó su vida a difundir valores de respeto por a libertad y los derechos humanos, "los mismos que forman el ADN de Madrid", ha concluido Botella.

En el acto, que ha tenido lugar en la Calle Velázquez, donde residió Ruiz-Giménez, Botella ha acompañado a la viuda del exministro y a sus familiares y amigos.