Begoña Gómez declara durante 35 minutos ante el juez en Plaza de Castilla
La esposa del Presidente del Gobierno, Begoña Gómez, ha comparecido este miércoles ante el Juzgado de Instrucción Número 41 de Madrid para declarar, durante 35 minutos, sobre su presunta implicación en delitos de tráfico de influencias, corrupción en los negocios, apropiación indebida e intrusismo. La causa incluye, entre otros aspectos, una investigación sobre el uso de un software de la Universidad Complutense de Madrid (UCM).
La declaración de Gómez comenzó a las 10:12 horas y se limitó exclusivamente a responder a las preguntas de su abogado, el exministro socialista Antonio Camacho. Finalizó a las 10:46 horas, tras lo cual abandonó las instalaciones judiciales. Según fuentes jurídicas, Gómez ha defendido su postura sin responder a preguntas del juez ni de las acusaciones.
Begoña Gómez llegó a los Juzgados de Plaza de Castilla a las 9:40 horas, accediendo al edificio por el garaje, en virtud de una autorización de la juez decana de Madrid. Su llegada estuvo marcada por un dispositivo de seguridad reducido en comparación con ocasiones anteriores, con varios furgones de la Policía Nacional desplegados en la zona desde las 08:33 horas.
Inicialmente, estaba previsto que la declaración tuviera lugar en la sala del juzgado en La Sexta planta, pero, debido a la ocupación de esta, se trasladó a otra sala en la tercera planta. Durante su entrada, Gómez estuvo escoltada por cuatro personas y vestida con un traje de chaqueta negra. La planta contó con seguridad adicional, permitiéndose únicamente la presencia de representantes de cuatro agencias de noticias.
Esta es la tercera vez que Gómez acude a declarar ante el juez instructor, Juan Carlos Peinado, en el marco de una causa que inicialmente se centraba en presuntos delitos de tráfico de influencias y corrupción en los negocios, pero que, desde octubre, incluye también apropiación indebida e intrusismo.
Las primeras citaciones, los días 5 y 19 de julio, se relacionaron con una denuncia de Manos Limpias, que acusaba a Gómez de haber "recomendado o avalado" a empresarios para licitaciones públicas aprovechando su condición de esposa del presidente del Gobierno. En ambas ocasiones, Gómez optó por acogerse a su derecho a no declarar, alegando falta de garantías en el procedimiento y la ausencia de una notificación adecuada.
La ampliación de la investigación en octubre incluyó una denuncia de Hazte Oír, que acusa a Gómez de apropiación indebida del software de la UCM y de participar de manera irregular en la elaboración de pliegos técnicos para la contratación de servicios relacionados con este proyecto.
Inicialmente, Gómez fue citada para declarar el 18 de noviembre, pero la comparecencia tuvo que posponerse debido a un viaje oficial a Brasil para la Cumbre del G-20.
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