Diego Velázquez vuelve a su calle

 Los ciudadanos de Madrid vuelven a disfrutar de la estatua de Diego Velázquez, emplazada entre la calle del mismo nombre y la de Juan Bravo.

La efigie había sido retirada varios días para poder sustituir su pedestal, con el objetivo de revitalizar la obra en homenaje al pintor sevillano.El conjunto contará a partir de ahora con una mayor altura, para que los viandantes aprecien mejor la escultura. La estatua ha ganado 1,50 metros de altura, pasando de 3, 28 metros a 4,78 metros.

Este nuevo pedestal ha sido creado utilizando materiales reciclados. Está construido con granito que procede de las bases de las farolas de la Puerta del Sol.

En esta escultura hecha en bronce se retrata al pintor con una paleta en la mano y con una vestimenta similar a la que utilizó en el cuadro de Las Meninas. Fue realizada por el escultor madrileño Francisco López Hernández y se encuentra en el mismo lugar desde 1991.