Márquez prioriza la familia y enfría la reconciliación con Valentino Rossi

El piloto español Marc Márquez (Ducati) ha asegurado que una reconciliación con el expiloto italiano Valentino Rossi "no depende solo" de él, y ha subrayado que solo quiere tener “de cara” a quienes le aportan algo.
El catalán se pronunció en estos términos durante una entrevista con DAZN con motivo de sus 200 Grandes Premios en la categoría reina del motociclismo.
“La gente que me tiene que aportar algo es la que quiero tener de cara”, declaró Márquez, zanjando así cualquier expectativa inmediata de entendimiento con Rossi.
La relación entre ambos pilotos se deterioró en los últimos años de la carrera deportiva de Rossi, nueve veces campeón del mundo, y los desencuentros han marcado parte reciente de la historia del MotoGP. No obstante, Márquez ha afirmado que superar al italiano no es un objetivo personal:
“Nunca me he fijado un número de victorias, por ejemplo. Llegar a 89 lo veo difícil, honestamente. Llegar a siete Mundiales de MotoGP lo veo más factible que llegar a 89 victorias, fácil no hay nada”.
Rivalidades, aprendizajes y evolución personal
El piloto de Cervera recordó que también tuvo roces con Dani Pedrosa y Jorge Lorenzo, a quienes considera rivales de gran nivel. En todo caso, valoró que estas situaciones no le afectaron en sus comienzos:
“Que te digan cosas malas me motiva”, reconoció, destacando su fortaleza mental desde su debut con apenas 20 años.
Márquez también repasó los aprendizajes adquiridos de sus antiguos compañeros. De Pedrosa destacó su capacidad técnica, de Lorenzo su estilo controlado y de Rossi su lectura de carrera:
“Intentaba pilotar como ellos, pero con mi estilo. No puedes copiar, pero sí acercarte a sus puntos fuertes”.
Sobre su debut en MotoGP en 2013, admitió no haber sido plenamente consciente de la magnitud del momento, lo cual le ayudó a gestionar la presión. “Impresiona ver a Pedrosa o a 'The Doctor' en parrilla, porque son tus ídolos”, confesó.
Competencia fraternal con Álex Márquez
Marc Márquez también habló sobre la lucha en el campeonato con su hermano Álex, actualmente compañero de parrilla y rival por el título. El piloto quiso dejar claro que el vínculo familiar está por encima de la competición:
“La familia va por delante de todo. A mi hermano siempre lo defenderé. Por él mato”.
Ambos han abordado con madurez su convivencia en pista y han establecido normas claras desde el inicio de la temporada:
“Si nos tenemos que pasar, nos pasamos. Y si nos caemos juntos, seguimos siendo hermanos”.
El piloto de Ducati concluyó señalando que, pese a la evolución personal y profesional, mantiene intactas sus ganas y su pasión por el motociclismo, elementos que, según él, forman parte de su ADN competitivo.