Juzgan a la exalcaldesa de Villa del Prado por adjudicar sin licitación servicios de electricidad y fontanería

La Audiencia Provincial de Madrid ha iniciado el juicio contra la exalcaldesa de Villa del Prado, acusada de un delito continuado de prevaricación administrativa por haber contratado de forma irregular y reiterada a dos empresas para prestar servicios de electricidad y fontanería al Ayuntamiento. La Fiscalía solicita para la procesada una pena de trece años de inhabilitación especial para empleo o cargo público, así como para el ejercicio del derecho de sufragio pasivo.
Según el escrito del Ministerio Fiscal, la acusada, que ejerció la alcaldía entre 2007 y mayo de 2019 tras haber sido previamente concejal, decidió de manera unilateral que el Consistorio contratase verbalmente a las empresas Cochele Electricidad S.L. e Instalaciones Barbero S.L. Estas compañías prestaron durante años servicios rutinarios y de mantenimiento sin que existiese expediente administrativo alguno que respaldara dichas adjudicaciones.
El fiscal sostiene que la alcaldesa actuó con pleno conocimiento de que vulneraba la normativa de contratación pública, desoyendo de forma reiterada las advertencias tanto de la Secretaría como de la Intervención municipal, que instaban a iniciar los correspondientes procedimientos de licitación para regularizar las prestaciones.
Instalaciones Barbero S.L. facturó al Ayuntamiento 80.741 euros en 2014, 92.672 euros en 2015, 42.336,94 euros en 2016 y 63.181,53 euros en 2017. Por su parte, Cochele Electricidad S.L. presentó facturas por 101.903 euros en 2014, 82.998 euros en 2015, 100.401,52 euros en 2016 y 69.163,61 euros en 2017. Estas cifras reflejan una relación comercial sostenida y cuantiosa, mantenida al margen de los mecanismos legales establecidos para la contratación pública.
Pese a que desde 2015 varios miembros de la oposición municipal denunciaron en sesión plenaria las irregularidades, no fue hasta 2019 cuando el Ayuntamiento procedió a licitar formalmente los contratos. En dicha licitación resultó adjudicataria del servicio de fontanería la propia Instalaciones Barbero S.L., una de las empresas beneficiadas durante años por los contratos verbales.