El Hospital Clínico San Carlos examina a 286 estudiantes con casos clínicos simulados

El Hospital Clínico San Carlos, en colaboración con la Universidad Complutense de Madrid, ha llevado a cabo una nueva edición de la Evaluación Clínica Objetiva Estructurada (ECOE), una prueba indispensable para que los estudiantes de sexto curso de Medicina puedan graduarse.
En total, 286 alumnos se han enfrentado este fin de semana a distintos escenarios clínicos simulados que evalúan su preparación para la práctica médica real.
La actividad ha congregado a estudiantes de los hospitales Clínico San Carlos, Gregorio Marañón y 12 de Octubre, quienes han participado en un circuito compuesto por veinte estaciones distribuidas en cinco áreas del hospital. Cada estación, de nueve minutos de duración, plantea una situación que los alumnos deben resolver, organizados en grupos reducidos que rotan simultáneamente por todas las pruebas.
Una compleja organización para simular la realidad médica
El desarrollo de esta actividad requiere un amplio despliegue organizativo. Además de los estudiantes, se movilizan aproximadamente cien personas más, entre evaluadores y pacientes simulados. Estos últimos son profesionales sanitarios o actores formados para interpretar con realismo distintas condiciones clínicas. En conjunto, se estima que cerca de 500 personas participan en la jornada.
Las estaciones de simulación, ubicadas en las áreas de consultas del Hospital Clínico San Carlos, están diseñadas para representar con fidelidad situaciones médicas reales. Los estudiantes deben aplicar sus conocimientos en tiempo limitado, demostrando su capacidad para desenvolverse en el entorno clínico.
La doctora Ana María Gómez, cirujana torácica del hospital y vicedecana de Ordenación Académica de la Facultad de Medicina de la Universidad Complutense, ha explicado que esta evaluación tiene como objetivo valorar las habilidades clínicas, técnicas, comunicativas y éticas de los futuros médicos. En concreto, se examinan ocho competencias esenciales: anamnesis, exploración física, técnicas y procedimientos, comunicación, juicio clínico y manejo diagnóstico-terapéutico, prevención y Promoción de la salud, trabajo interprofesional, así como aspectos éticos, legales y de profesionalismo.
Una prueba consolidada desde 2006
Desde 2006, el Hospital Clínico San Carlos y la Universidad Complutense organizan esta evaluación, que se ha convertido en obligatoria tras la implantación del Plan Bolonia. El modelo desarrollado en Madrid ha sido adoptado por otras facultades de Medicina en España, consolidándose como una herramienta clave para asegurar la preparación de los nuevos profesionales sanitarios.