El cardenal Becciu renuncia a participar en el Cónclave por "el bien de la Iglesia"
El cardenal Giovanni Angelo Becciu, condenado por irregularidades financieras relacionadas con la compra fraudulenta de un edificio en Londres, ha anunciado que no participará en el próximo Cónclave para la elección del nuevo Papa, argumentando que su decisión responde "al bien de la Iglesia".
En un comunicado difundido este lunes y recogido por el portal oficial del Vaticano, Vatican News, Becciu manifestó su intención de "obedecer como siempre he hecho a la voluntad del Papa Francisco", asegurando además que mantiene su "convicción de inocencia" respecto a las acusaciones que pesan sobre él. El cardenal, de origen sardo, subrayó su deseo de contribuir "a la comunión y serenidad" del proceso de elección pontificia.
Esta renuncia se produce pocos días después de que trascendieran dos cartas firmadas por el Papa Francisco, en las que expresaba su voluntad de excluir a Becciu del Cónclave. Según publicó el pasado viernes el periodista Giovanni Maria Vian en el diario italiano Domani, el cardenal secretario de Estado, Pietro Parolin, mostró a Becciu ambas misivas, una fechada en 2023 y otra en marzo de este año, cuando el Pontífice atravesaba una grave enfermedad respiratoria.
Restricciones tras la pérdida de derechos cardenalicios
La aparición de estas cartas coincidió con la controversia generada por la intención de Becciu de participar en el Cónclave, dado que había estado presente en las congregaciones de cardenales previas en Roma y defendía su derecho a entrar en la Capilla Sixtina. Cabe recordar que en 2020 el Papa Francisco le retiró los derechos vinculados al cardenalato, aunque no había, hasta ahora, una disposición escrita que especificara su exclusión.
Inicialmente, el decano del Colegio Cardenalicio, Giovanni Battista Re, habría indicado a Becciu que podría participar en el Cónclave. Sin embargo, el cardenal camarlengo, Kevin Joseph Farrell, le transmitió posteriormente la voluntad verbal del Papa de impedir su entrada.
En la lista oficial de cardenales publicada por la Santa Sede, Becciu ya figuraba desde el principio en el grupo de no electores, pese a que cumple con el requisito de edad para ser elector, al tener menos de 80 años.
