La Comunidad pedirá declarar zona catastrófica los municipios afectados por las lluvias

El Consejo de Gobierno de la Comunidad de Madrid, presidido por Isabel Díaz Ayuso, solicitará este miércoles al Ejecutivo central la declaración de ‘Zona Gravemente Afectada por una Emergencia de Protección Civil’ para los municipios damnificados por las intensas lluvias que han azotado la región durante las últimas tres semanas. Desde el pasado 5 de marzo, un total de 111 municipios madrileños han registrado diversos problemas a causa de las borrascas encadenadas, según ha informado el Gobierno autonómico.
Durante este periodo, la Comunidad de Madrid ha tramitado 921 expedientes relacionados con los efectos del temporal, lo que refleja la magnitud de la situación y la urgencia de canalizar ayudas y medidas excepcionales. A ello se suma la publicación este lunes en el Boletín Oficial de la Comunidad de Madrid de un paquete de ayudas por valor de 10 millones de euros, destinado a los municipios de menos de 20.000 habitantes, con el objetivo de iniciar de inmediato las labores de reconstrucción en las zonas más afectadas.
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En un desayuno informativo organizado por Europa Press, la presidenta madrileña agradeció el trabajo realizado por los profesionales del servicio de Emergencias 112, que efectuaron más de 500 intervenciones en apenas 18 días, y reconoció la colaboración de los alcaldes de los municipios perjudicados, “de todo signo político”. Ayuso subrayó la buena coordinación de los servicios públicos, cuya actuación —dijo— ha evitado daños personales y ha permitido mantener la normalidad en una de las regiones más densamente pobladas de Europa.
La presidenta celebró el final del que ha sido el episodio de precipitaciones más intenso registrado en la Comunidad de Madrid en los últimos 135 años. Según destacó, el resultado de este desafío meteorológico ha puesto de relieve la calidad de las infraestructuras regionales, la capacidad de respuesta del sistema de emergencias y la fortaleza de los servicios públicos, que han permitido proteger vidas y minimizar el impacto en la vida cotidiana de los madrileños.