La Comunidad de Madrid rechaza homogeneizar la tasa de residuos municipales

La Comunidad de Madrid no tiene previsto unificar los distintos modelos de tasas de basuras aplicados por los ayuntamientos dentro de la futura Estrategia de Residuos de la región. Así lo ha confirmado la directora general de Transición Energética y Economía Circular, Cristina Aparicio, durante su intervención en la Comisión de Medio Ambiente, Agricultura e Interior celebrada este martes en la Asamblea de Madrid.
En respuesta a una pregunta formulada por el diputado de VOX Íñigo Henríquez de Luna, Aparicio ha defendido que la disparidad de modelos responde a la realidad concreta de cada municipio, que tiene competencias propias en materia de gestión de residuos. Según ha subrayado, la normativa estatal ya obliga a incluir ciertos conceptos en la tarifa, pero deja margen a las entidades locales para adaptarla a sus necesidades y circunstancias.
Henríquez de Luna planteó si, al igual que se pretende avanzar hacia un criterio común en materia de zonas de bajas emisiones, no sería oportuno homogeneizar también la aplicación de la tasa de basuras. A su juicio, la falta de una directriz regional está generando desigualdades entre los vecinos de distintos municipios, que afrontan costes muy distintos por un mismo servicio esencial.
La directora general ha descartado esta posibilidad, al considerar que la estrategia regional no es el instrumento legal adecuado para imponer una tasa homogénea. “Cada municipio tiene su sistema de recogida, su periodicidad y sus costes específicos”, ha explicado, recordando además que el Gobierno regional no tiene la competencia para intervenir en la fijación de tributos locales.
Aparicio también ha defendido que su papel no es imponer, sino acompañar a los ayuntamientos, proporcionándoles herramientas técnicas y asesoramiento para que puedan optimizar sus modelos de gestión de residuos. En este sentido, ha recordado que el próximo 10 de abril finaliza el plazo para la implantación de la tasa obligatoria, conforme a la normativa estatal, y será entonces cuando se evalúe su cumplimiento.
El parlamentario de Vox ha cuestionado si el Ejecutivo autonómico está realizando un seguimiento efectivo del cumplimiento por parte de los ayuntamientos, y ha puesto como ejemplo casos como el de Leganés, que ha optado por no aplicar la tasa, frente a otros municipios gobernados por el Partido Popular que sí lo han hecho, sin ofrecer, en su opinión, compensaciones adecuadas a los contribuyentes.
Cristina Aparicio ha respondido que ninguna comunidad autónoma ha intervenido en la armonización de esta tasa, y ha señalado que hacerlo sería tan improcedente como unificar el Impuesto sobre Bienes Inmuebles. Ha insistido en que la estrategia de residuos está centrada en fomentar buenas prácticas y no en imponer criterios únicos que ignoren la diversidad de contextos locales.
La directora general ha explicado que uno de los ejes fundamentales de la futura Estrategia de Economía Circular será premiar a aquellos municipios que cumplan con los objetivos de excelencia en la gestión de residuos. Ha recordado que, a finales de 2023, el Gobierno regional concedió una ayuda específica de tres millones de euros a la mancomunidad de Loeches por su buena gestión, y que este tipo de incentivos continuarán en el marco de la estrategia.
“El objetivo no es premiar a quienes lo hacen de forma regular, sino a quienes cumplen y destacan en la gestión eficiente”, ha afirmado. La intención del Ejecutivo regional es crear un sistema en el que los datos sean comparables entre municipios y se compartan las mejores prácticas, sin necesidad de imponer modelos únicos que podrían ser ineficaces o injustos.
Pese a ello, desde Vox han insistido en que, sin una intervención clara de la Comunidad de Madrid, la desigualdad entre municipios seguirá creciendo. “Hay ayuntamientos que están trasladando el 100% del coste a los vecinos, mientras otros están manipulando los cálculos para suavizar el impacto”, ha advertido Henríquez de Luna.