La Comunidad limitará el uso de dispositivos en las aulas de Infantil y Primaria

La Comunidad de Madrid se convertirá en la primera región de España en prohibir el uso individual de dispositivos digitales en las etapas de Educación Infantil y Primaria. Esta decisión, que marcará un punto de inflexión en la política educativa nacional, se aplicará a partir del próximo curso 2025-2026, con la entrada en vigor de un nuevo decreto que el Gobierno autonómico está ultimando y que afectará a más de medio millón de alumnos en unos 2.000 centros sostenidos con fondos públicos.
La normativa establecerá que los alumnos de estas etapas no podrán trabajar de forma individual con ordenadores, tablets o móviles, ni dentro ni fuera del horario escolar. Asimismo, sus profesores no podrán encargar deberes ni actividades que impliquen el uso de pantallas fuera del aula. El texto, según ha informado la Consejería de Educación, Ciencia y Universidades al Consejo de Gobierno regional, busca limitar el acceso precoz y excesivo a las tecnologías de la información, sin renunciar a que los estudiantes adquieran las competencias digitales previstas en el currículo oficial.
Se permitirá un uso compartido de dispositivos entre varios alumnos, pero exclusivamente con fines pedagógicos, bajo supervisión docente y con un tiempo máximo semanal establecido por tramos de edad. En el segundo ciclo de Infantil (de 3 a 6 años) y en los dos primeros cursos de Primaria, ese tiempo no podrá superar una hora semanal. Los alumnos de 3º y 4º de Primaria podrán emplear las pantallas durante hora y media, y los de 5º y 6º hasta dos horas por semana. Los más pequeños, de 0 a 3 años, no tendrán ningún contacto con estos dispositivos.
En la Educación Secundaria Obligatoria, la regulación del uso de dispositivos quedará en manos de los propios centros, que podrán determinar su utilización en función de la edad, el grado de madurez de los alumnos y las características de las enseñanzas impartidas. No obstante, se contemplan excepciones en todos los niveles educativos para aquellos estudiantes con necesidades específicas de apoyo educativo, siempre que medie un informe psicopedagógico que justifique el uso continuado de herramientas digitales. También se permitirá su uso en asignaturas optativas o proyectos en los que los dispositivos resulten imprescindibles para alcanzar los objetivos pedagógicos.
Los centros que actualmente aplican un modelo educativo basado en el uso individual de dispositivos digitales dispondrán de una moratoria hasta el 31 de agosto de 2026 para adaptar sus programas a los nuevos requisitos del decreto.