Los visitantes redescubrirán hasta el 1 de junio la bohemia literaria en el Museo de Historia de Madrid

El Museo de Historia de Madrid acoge hasta el 1 de junio la exposición Madrid, ¡Viva la bohemia! Los bajos fondos de la vida literaria, una muestra que invita a los madrileños a adentrarse en los ambientes culturales y marginales que marcaron la literatura y el periodismo de finales del siglo XIX e inicios del XX.
Organizada por el Ayuntamiento de Madrid, la exposición reúne una cuidada selección de piezas como óleos, dibujos, grabados, carteles, fotografías, películas, libros y periódicos que ofrecen una visión integral de este fenómeno artístico y vital.
La delegada de Cultura, Turismo y Deporte, Marta Rivera de la Cruz, ha visitado este miércoles la muestra, que permanecerá abierta al público de martes a domingo, en horario de 10 a 20 horas, en la Sala de Exposiciones Temporales del propio museo. Durante su intervención, Rivera de la Cruz ha subrayado que “esta exposición es una oportunidad única para adentrarnos en la bohemia madrileña, que llegó a los periódicos, la literatura y los teatros de finales del XIX”. Asimismo, ha destacado que los asistentes podrán “recorrer los cafés que alimentaron las tertulias intelectuales de la época y el Madrid que tan bien describió Valle-Inclán”.
Un viaje desde París a Valle-Inclán
La muestra propone un recorrido en cinco espacios temáticos que permiten contextualizar la evolución del concepto de bohemia desde su origen francés hasta su consolidación en Madrid. El itinerario se inicia con una aproximación al término bohemia, tanto en su dimensión simbólica como en sus implicaciones sociales, antes de introducir al visitante en los distintos ambientes que lo definieron.
El primer espacio, París: las primeras luces, remite a la capital francesa como cuna de este modo de vida alternativo, con referencias a obras como la Ópera La Bohème o La Zarzuela satírica La golfemia. A continuación, el ámbito titulado El resplandor español traslada la mirada al Madrid de 1840, escenario del surgimiento de la primera generación de bohemios nacionales, vinculada al teatro, el periodismo y la literatura por entregas.
El tercer núcleo, La bohemia heroica, está dedicado a un conjunto de escritores que, agrupados bajo esta denominación, expresaron un fuerte compromiso social y una actitud de rechazo hacia los valores burgueses dominantes. Por su parte, Espacios bohemios aborda el paisaje nocturno madrileño frecuentado por estos autores, con especial atención a las últimas farolas de gas y a los cafés que servían de refugio a las tertulias y a la creación artística.
Finalmente, el itinerario concluye con La luz en el espejo, un apartado centrado en la figura de Ramón María del Valle-Inclán y su obra Luces de Bohemia (1924), considerada el epítome literario de esta estética y modo de vida.