Madrid ampliará un 3,75% la reserva de contratos socialmente responsables en 2025 hasta los 6,2 millones
La Junta de Gobierno del Ayuntamiento de Madrid ha aprobado una medida que fija en un mínimo del 3,75% el porcentaje de contratos públicos que en 2025 se reservarán a centros especiales de empleo de iniciativa social y empresas de inserción, con una dotación mínima de 6,2 millones de euros. Esta cifra representa un aumento respecto al 3,5% de 2024 y los 5,4 millones reservados este año.
Según explicó la vicealcaldesa y portavoz municipal, Inma Sanz, durante la rueda de prensa, esta medida fomenta la inclusión laboral y social de personas con discapacidad y colectivos en riesgo de exclusión. La iniciativa también refuerza el compromiso del Ayuntamiento con la contratación pública inclusiva.
Tras la aprobación del acuerdo, el Área de Economía, Innovación y Hacienda, encabezada por Engracia Hidalgo, fijará las directrices y aprobará el plan de contratos reservados a finales de este año o principios del próximo.
Desde 2019, se han ejecutado 274 contratos municipales por un importe superior a 40 millones de euros. Estas adjudicaciones han incluido servicios como mantenimiento, limpieza, jardinería, mensajería y actividades auxiliares en edificios municipales.
En 2024, se espera superar los 9,6 millones de euros del plan de reserva gracias a la ejecución de medio centenar de contratos reservados a estas entidades, cifra que ha mejorado considerablemente los importes inicialmente estimados.
Los centros especiales de empleo de iniciativa social son aquellos organismos con un mínimo del 70% de la plantilla formada por personas con discapacidad y que, además, son promovidos y participados en más de un 50% por una o varias entidades sin ánimo de lucro o que tengan reconocido su carácter social en sus estatutos.
Estos centros están obligados a la reinversión íntegra de sus beneficios en la creación de oportunidades de empleo para personas con discapacidad y en la mejora de su actividad de economía social, además de poder reinvertir en sus propias instalaciones o en otras análogas
Las empresas de inserción, por su parte, se definen como aquellas sociedades mercantiles o cooperativas que se dedican a la producción de bienes y servicios cuyo objeto social tiene como fin la integración y formación sociolaboral de personas en situación de exclusión social como tránsito al empleo ordinario.
Deben estar promovidas o participadas por entidades sin ánimo de lucro, mantengan anualmente un porcentaje mínimo estipulado de trabajadores en proceso de inserción y que apliquen al menos el 80% de sus resultados en mejorar o ampliar sus estructuras productivas y de inserción.
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