La Comunidad de Madrid refuerza su red de centros para jóvenes víctimas de violencia

La Comunidad de Madrid cuenta con cuatro centros residenciales destinados a jóvenes de entre 18 y 25 años que han sufrido violencia en el ámbito familiar o de pareja. Con una inversión de tres millones de euros por parte del Gobierno regional, estos espacios ofrecen atención individualizada con el objetivo de dotar a las jóvenes de autonomía y ayudarlas en su proceso de recuperación.
En estos recursos, actualmente residen 52 mujeres que han encontrado un refugio seguro donde pueden iniciar una nueva etapa de la mano de psicólogos y especialistas. La ubicación de los centros se mantiene en secreto por motivos de seguridad, garantizando así la protección de sus residentes, quienes han dejado atrás entornos de maltrato para enfocarse en su bienestar emocional y su futuro.
"Una experiencia que te ayuda a salir de una situación muy grave"
Paula, una de las jóvenes acogidas en estos centros (nombre ficticio para preservar su identidad), ha compartido su experiencia destacando la importancia de estos espacios en su proceso de reconstrucción personal. "Es muy difícil salir de casa, pero hay maneras. No os quedéis con gente que os ha hecho daño", ha expresado, alentando a otras jóvenes a buscar ayuda.
Desde su ingreso, ha notado un cambio significativo en su desarrollo emocional y psicológico. "Aquí aprendes a expresarte mejor, y eso es clave a lo largo de la vida", ha añadido.
Belén Abriela, psicóloga del Centro para Mujeres Jóvenes Víctimas de Violencia número cuatro, ha calificado el trabajo que realizan con las acogidas como "un proceso maravilloso y mágico" en el que se produce una auténtica transformación.
Las residencias están diseñadas para estancias de hasta dos años, con posibilidad de prórroga en intervalos de tres a seis meses. Durante este periodo, se sigue un plan integral que combina terapia psicológica con formación académica y profesional para fomentar la autonomía de las jóvenes.
Recursos para la autonomía y la inserción laboral
Las residentes reciben terapia individual y grupal, ajustando la frecuencia de las sesiones en función del avance personal de cada una. "Podemos llegar a dar hasta cuatro sesiones semanales cuando conseguimos generar un vínculo, y eso es fundamental", ha subrayado la psicóloga.
Además del apoyo emocional, se trabaja en la preparación para la vida independiente, evitando situaciones de dependencia que puedan derivar en nuevas relaciones de violencia. Programas como Prevención de Conductas de Riesgo, Inserción Laboral y Ocio y Tiempo Libre complementan este proceso, brindando herramientas para una reinserción social efectiva.
"La violencia también está en la familia"
Otra de las jóvenes acogidas, Pilar (nombre ficticio), ha querido destacar que la violencia no solo se da en la pareja, sino también dentro del entorno familiar, algo que, en su opinión, no siempre se reconoce. "No hay mucha conciencia de que la familia también puede ejercer violencia", ha señalado.
Para ella, lo más importante es dejar atrás el sentimiento de culpa y pedir ayuda. "Hay que hablarlo con quien sea: una profesora, una amiga, un orientador… Lo importante es no callarse", ha insistido.
40 millones de euros para combatir la violencia
El presupuesto de la Comunidad de Madrid en la lucha contra la violencia hacia la mujer alcanza los 40 millones de euros en 2025. Con esta financiación, se mantienen operativos distintos recursos, como centros de emergencia, acogida y pisos tutelados.
La Consejería de Familia, Juventud y Asuntos Sociales también cuenta con dos Centros de Crisis 24 horas, el último de los cuales fue inaugurado a finales de 2024 y dispone de ocho plazas residenciales. Hasta la fecha, ha atendido a medio centenar de mujeres.
La consejera Ana Dávila ha visitado el centro número cuatro y ha resaltado la importancia de estos recursos en la Comunidad de Madrid. "Queremos seguir dándolos a conocer para que todas las mujeres que lo necesiten sepan que pueden acceder a ellos y recibir ayuda", ha manifestado. Durante el pasado año, 65 mujeres fueron atendidas en las 52 plazas disponibles en la región, un número que se espera mantener o aumentar en el futuro.
Escribir un comentario