España introducirá controles de identidad para proteger a los adolescentes del juego
España se encuentra en un proceso de reforma legislativa para endurecer los controles de acceso a los juegos de azar y evitar la participación de menores de edad.
La nueva normativa, impulsada por el Grupo Parlamentario Socialista bajo el liderazgo del presidente Pedro Sánchez, busca implementar verificaciones obligatorias de identidad en operadores online y establecimientos físicos.
Esta iniciativa responde a una creciente preocupación sobre el impacto del juego en adolescentes y la necesidad de reforzar las barreras de acceso para evitar su exposición a riesgos de adicción.
El objetivo es garantizar que los menores de 18 años no puedan acceder a ninguna forma de juego, ya sea en salones recreativos, casas de apuestas o plataformas de juego online.
Para ello, se establecerán mecanismos más rigurosos que impedirán que los adolescentes eludan los controles actuales.
Además, las empresas del sector estarán obligadas a reforzar sus procedimientos de identificación, con sanciones más severas para quienes incumplan las normativas.
Un problema en crecimiento
La preocupación por el acceso de menores al juego no es nueva, pero ha cobrado mayor urgencia tras la publicación de un estudio en 2022 que reveló que el 21,5% de los adolescentes de entre 14 y 18 años habían participado en juegos de azar, ya sea en línea o en persona.
Este dato alarmante, sumado al crecimiento del mercado de juego en el segundo trimestre de 2024, ha acelerado la intervención del Ministerio de Sanidad.
El informe destacó que la mayoría de los adolescentes que participaron en juegos de azar lo hicieron a través de máquinas recreativas en bares, casas de apuestas y plataformas en línea que no aplicaban controles efectivos.
Además, el estudio reveló que los juegos de azar más populares entre los jóvenes incluyen las apuestas deportivas, las tragaperras y los juegos de cartas en línea.
Otro dato preocupante es que un alto porcentaje de estos menores afirmaron haber utilizado identidades falsas o cuentas de terceros para sortear las restricciones de edad.
El aumento de la exposición al juego entre los menores ha coincidido con el crecimiento del sector del juego en España.
Según los datos más recientes, los ingresos del juego online aumentaron significativamente en el segundo trimestre de 2024, lo que ha llevado a los reguladores a tomar medidas más estrictas.
Las autoridades han señalado que, sin una intervención adecuada, existe el riesgo de que más adolescentes desarrollen problemas de ludopatía en el futuro.
Medidas propuestas
Las nuevas regulaciones contemplan:
⇒ Verificación de identidad obligatoria en máquinas tragamonedas y otros dispositivos de juego.
⇒ Restricción de acceso a cualquier persona menor de 18 años en casinos físicos y plataformas online.
⇒ Limitaciones en los juegos en línea, promoviendo mecánicas menos adictivas.
⇒ Revisión de la publicidad y marketing de los operadores para reducir el atractivo del juego entre los menores.
Procedimiento legislativo
La propuesta ha sido aceptada y se encuentra bajo revisión por la Comisión Mixta para el Estudio de los Problemas de las Adicciones. Aún no ha llegado al Pleno del Congreso de los Diputados, donde deberá ser aprobada por mayoría antes de su remisión al Senado para su aprobación final.
En comparación, Estados Unidos también enfrenta desafíos similares en la Protección de menores contra el juego.
Si bien cada estado tiene regulaciones específicas, en muchos casos los controles de identidad y la aplicación de normativas varían significativamente.
En estados como Nueva Jersey y Pensilvania, donde el juego en línea está regulado, existen estrictos protocolos de verificación de identidad y herramientas de autoexclusión para prevenir la ludopatía.
Sin embargo, en otras regiones con menos regulaciones, los menores pueden acceder con mayor facilidad a plataformas no reguladas. A diferencia de España, donde el enfoque es una regulación a nivel nacional, en EE. UU. la fragmentación de las normativas estatales dificulta la implementación de medidas homogéneas en todo el país.
En paralelo a estas regulaciones, en EE. UU. se ha lanzado el proyecto Jackpot Sounds, una iniciativa que planea agregar repeticiones de grandes ganancias obtenidas en casinos en línea legales.
Este proyecto busca destacar la emoción de las grandes victorias y atraer a más jugadores a las plataformas reguladas, lo que podría generar un debate sobre cómo equilibrar la promoción del juego con las medidas de protección al consumidor.
Marco regulatorio y obligaciones para los operadores
Actualmente, los operadores en España ya deben cumplir con normativas de Conozca a su Cliente (KYC) y Prevención del Lavado de Dinero (AML). Sin embargo, con la nueva regulación, los controles de identidad serán aún más estrictos, afectando tanto a operadores online como a establecimientos físicos.
España en el contexto europeo
El país sigue la tendencia de otras naciones europeas que han implementado medidas similares para combatir la adicción al juego en menores.
Reino Unido, Italia y Alemania han introducido regulaciones más estrictas en los últimos años, lo que ha llevado a una reducción del acceso de adolescentes a juegos de azar.
Algunas de las estrategias implementadas en estos países incluyen:
Reino Unido
⇒ Verificación de identidad obligatoria para todos los jugadores antes de realizar depósitos o apuestas.
⇒ Límites estrictos en la publicidad de juegos de azar dirigidos a menores.
⇒ Prohibición del uso de tarjetas de crédito para realizar apuestas online.
Italia
⇒ Reducción drástica de la publicidad de juegos de azar en medios de comunicación y redes sociales.
⇒ Controles más estrictos en locales de apuestas físicas para evitar el acceso de menores.
⇒ Campañas de concienciación sobre los riesgos del juego patológico en jóvenes.
Alemania
⇒ Implementación de un registro centralizado para jugadores que permite a los operadores verificar la edad y el historial de apuestas de cada usuario.
⇒ Límites en las cantidades que se pueden apostar en juegos de azar online.
⇒ Mayor control sobre la concesión de licencias a operadores de juego.
Estas regulaciones han demostrado ser efectivas en la reducción del acceso de los menores al juego, aunque siguen existiendo desafíos, como la proliferación de operadores ilegales y la facilidad de acceso a plataformas no reguladas.
Impacto en la industria del juego
El endurecimiento de las regulaciones podría tener un impacto significativo en la industria, que en 2023 generó más de 9.000 millones de euros en ingresos. En este contexto, la posible salida a Bolsa de CIRSA SA, respaldada por Blackstone, podría cambiar el panorama del sector en España.
Consecuencias para los Operadores de Juego
La introducción de verificaciones obligatorias de identidad y mayores restricciones en la publicidad afectará directamente a los operadores de juego, tanto en el sector físico como en el online. Entre los principales cambios que podrían impactar la industria se incluyen:
⇒ Mayor inversión en tecnología de verificación: Los operadores deberán actualizar sus sistemas para cumplir con los nuevos requisitos de identificación.
⇒ Reducción del número de jugadores: Al limitar el acceso, algunos clientes que antes podían registrarse sin control estricto ahora no podrán hacerlo.
⇒ Posible migración a plataformas ilegales: Los jugadores que encuentren barreras más estrictas podrían recurrir a plataformas no reguladas, lo que generaría un desafío adicional para las autoridades.
⇒ Disminución de ingresos en el corto plazo: Con restricciones más duras, es probable que las empresas de juego enfrenten una caída inicial en sus ingresos hasta que logren adaptarse al nuevo marco normativo.
Inversión y competencia en el sector
El mercado del juego en España se encuentra en un momento clave de transformación. La posible salida a Bolsa de CIRSA SA, una de las empresas más importantes del sector, representa un cambio en la estructura financiera del mercado. Respaldada por el gigante de inversión Blackstone, CIRSA podría beneficiarse de la regulación más estricta, ya que su capacidad financiera le permitirá adaptarse mejor que sus competidores más pequeños.
Por otro lado, las empresas del sector tendrán que reevaluar sus estrategias de crecimiento e inversión.
Algunas podrían optar por fusionarse con otras compañías para compartir costos regulatorios, mientras que otras podrían intentar diversificar su oferta de entretenimiento, apostando por juegos con menor impacto adictivo y mayor regulación.
La creciente preocupación por el juego en menores
En los últimos años, el problema del juego en menores ha comenzado a ser una preocupación importante para los países de todo el mundo.
Con el rápido aumento de las plataformas de juego en línea y la mayor disponibilidad de máquinas tragamonedas, los riesgos para los grupos vulnerables, particularmente los adolescentes, han crecido. Una de las respuestas más recientes a este problema proviene de España, que ha introducido nuevas regulaciones destinadas a proteger a los menores del juego.
Estas medidas incluyen la implementación de verificaciones obligatorias de identidad (ID) para todos los operadores de juegos con el fin de garantizar que los menores no participen en actividades de apuestas.
Por otro lado, Estados Unidos presenta una situación más compleja debido a la regulación del juego que varía de estado a estado. Aunque ambos países reconocen la importancia de proteger a los jóvenes, sus enfoques difieren significativamente en términos de implementación y alcance.
La respuesta de españa al juego en menores
Recientemente, España ha anunciado una serie de medidas diseñadas para combatir el juego en menores. Esto es una respuesta a las crecientes preocupaciones sobre las altas tasas de juego entre los jóvenes, que fueron destacadas por un estudio de 2022 que reveló que el 21.5% de los estudiantes españoles de entre 14 y 18 años habían jugado con dinero en el último año.
Para abordar esta alarmante tendencia, el gobierno español ha propuesto verificaciones obligatorias de ID para todas las actividades de juego, tanto en línea como en lugares físicos. Esto requeriría que los operadores verificaran la identidad de todos los participantes, asegurándose de que aquellos por debajo de la edad legal para jugar, que es de 18 años, quedaran excluidos de estas actividades.
Además, las medidas de España se extienden a las máquinas de juego y tragamonedas que se encuentran comúnmente en espacios públicos.
Estas máquinas también se equiparán con tecnología para verificar la identidad de la persona que las utiliza, añadiendo una capa adicional de protección.
Este enfoque pretende crear una barrera integral contra el juego en menores, utilizando tecnología moderna para identificar y bloquear a los individuos menores de edad que intenten acceder a los servicios de juego. La idea es proporcionar un entorno más seguro y regulado, haciendo que sea difícil para los menores eludir las restricciones de edad.
Además, el gobierno español está prestando atención al tema de la autoexclusión, que permite a las personas que están luchando contra la adicción al juego excluirse voluntariamente de las actividades de juego.
Las nuevas regulaciones garantizarían que cualquier persona que se haya excluido voluntariamente de las actividades de juego no pueda participar, ofreciendo otra capa de protección para las personas vulnerables.
Estados Unidos: un enfoque fragmentado en la regulación del juego
En contraste con el enfoque unificado de España, Estados Unidos tiene un sistema mucho más fragmentado y descentralizado en cuanto a las leyes del juego.
A diferencia de España, donde el gobierno está implementando una política nacional para combatir el juego en menores, Estados Unidos opera de manera diferente, con leyes que varían de estado a estado. Cada estado establece su propia edad legal para el juego y sus regulaciones, creando un mosaico de reglas y estrategias de aplicación en todo el país.
La edad legal para jugar en Estados Unidos varía dependiendo del estado y del tipo de juego. En la mayoría de los estados, la edad legal para jugar en casinos es de 21 años, pero existen excepciones. Por ejemplo, en algunos estados como Montana, Wyoming y New Hampshire, las personas pueden jugar legalmente a los 18 años.
De manera similar, en ciertos estados, la edad legal para actividades como las apuestas en el hipódromo o las loterías estatales puede ser inferior a 21 años.
Esta variabilidad ha creado confusión, ya que diferentes jurisdicciones aplican diferentes límites de edad, y los menores pueden acceder a ciertos tipos de juego dependiendo de su ubicación.
Uno de los desafíos en Estados Unidos es la proliferación de plataformas de juego en línea y móviles, que han facilitado el acceso de los menores a los servicios de juego. Mientras que los casinos físicos pueden tener controles de ID rigurosos, muchas plataformas en línea no cuentan con el mismo nivel de seguridad.
Las plataformas de juego en línea, incluidos los casinos, las salas de póker y las apuestas deportivas, tienen diferentes niveles de medidas de verificación de edad, y en algunos casos, dependen únicamente de la autodeclaración del usuario.
Esto crea oportunidades para que los menores eludan las restricciones de edad con poca dificultad, lo que representa un riesgo significativo para los jóvenes.
Además, la legalización de las apuestas deportivas en Estados Unidos, tras la decisión de la Corte Suprema de 2018 que permitió a los estados legalizar las apuestas deportivas, ha exacerbado aún más el problema.
Con la publicidad agresiva dirigida a los jóvenes, las apuestas deportivas han ganado una gran tracción entre los adolescentes. A medida que las apuestas deportivas siguen creciendo, la preocupación sobre su impacto en las audiencias más jóvenes ha aumentado, especialmente con el aumento del “juego rápido”, donde los jóvenes se sienten atraídos por las apuestas rápidas y la gratificación instantánea.
Medidas para abordar el juego en menores en Estados Unidos
Aunque Estados Unidos no tiene una política nacional como España, algunos estados han tomado medidas para mejorar la verificación de la edad y proteger a los menores del juego.
Un ejemplo de ello es la Lotería de Texas, que ha implementado escaneos obligatorios de ID para la compra de boletos de lotería en las máquinas expendedoras. Esto requiere que los individuos escaneen una identificación con foto emitida por el gobierno para confirmar que tienen al menos 18 años antes de comprar boletos.
Esta medida tiene como objetivo reducir las posibilidades de que los menores compren boletos de lotería en las máquinas expendedoras, que son fácilmente accesibles en varios lugares públicos.
Algunos estados también han introducido otras medidas, como la implementación de tecnología de reconocimiento facial en los casinos físicos para asegurarse de que la persona que ingresa al casino tenga la edad legal para jugar.
Además, se están llevando a cabo discusiones sobre la implementación de una edad uniforme de 21 años para todas las formas de juego, incluidas las loterías y los Deportes de fantasía. El objetivo es estandarizar las restricciones de edad y proporcionar un enfoque unificado para proteger a los jóvenes adultos de los peligros del juego.
A pesar de estos esfuerzos, todavía existen brechas significativas en la aplicación de la verificación de edad, especialmente en el ámbito del juego en línea.
Muchos críticos argumentan que las regulaciones actuales no son suficientes para abordar las crecientes preocupaciones sobre el juego en menores, y es necesario implementar salvaguardias más estrictas.
El impacto del juego en línea y las aplicaciones móviles
Uno de los mayores desafíos tanto en España como en Estados Unidos es el auge de las plataformas de juego en línea y las aplicaciones móviles de apuestas.
Estas plataformas facilitan el acceso de las personas a los servicios de juego en cualquier momento y desde cualquier lugar, creando un entorno en el que la verificación de edad puede ser eludida.
Mientras que España está tomando medidas para regular tanto el juego en línea como el físico a través de verificaciones obligatorias de ID, Estados Unidos enfrenta mayores dificultades para monitorear y regular el juego en línea, ya que involucra plataformas interestatales e internacionales que pueden no cumplir siempre con las leyes locales.
En España, donde el juego en línea ya está altamente regulado, la introducción de verificaciones obligatorias de ID es una medida proactiva para reducir el acceso de los menores a las plataformas de juego. Sin embargo, Estados Unidos tiene un paisaje regulatorio más fragmentado, con algunos estados, como Nevada y Nueva Jersey, implementando regulaciones robustas sobre el juego en línea, mientras que otros aún no regulan completamente las plataformas en línea.
Conclusión
El sector del juego en España está entrando en una fase de transformación debido a las nuevas regulaciones. Aunque estas medidas buscan proteger a los menores y prevenir la adicción, también generan retos significativos para la industria.
Empresas como CIRSA podrían beneficiarse de la situación, mientras que los operadores más pequeños podrían enfrentar dificultades para adaptarse.
A medida que el marco regulatorio se endurezca, los operadores deberán encontrar un equilibrio entre la viabilidad comercial y el cumplimiento normativo.
Las estrategias a corto y largo plazo incluirán ajustes en sus modelos de negocio, inversiones en tecnología de verificación y cambios en las estrategias de captación de clientes.
Por otro lado, los reguladores deberán monitorear de cerca los efectos de estas nuevas políticas para asegurarse de que cumplen con sus objetivos sin fomentar un mercado ilegal más activo. Un desafío clave será evitar que los jugadores migren a plataformas no reguladas, lo que podría socavar los esfuerzos de protección al consumidor.
España se suma a la tendencia global de endurecer las regulaciones en el sector del juego, buscando minimizar el impacto en los grupos vulnerables.
El futuro del sector del juego en España estará marcado por su capacidad de adaptación a esta nueva realidad y por el impacto de estas regulaciones en la economía y la sociedad en general.
Mientras que tanto España como Estados Unidos reconocen la necesidad de proteger a los menores de los peligros del juego, sus enfoques difieren significativamente.
La política nacional de España de verificaciones obligatorias de ID representa un enfoque centralizado y avanzado para proteger a los jóvenes, particularmente a la luz del creciente problema del juego entre los adolescentes.
Por otro lado, el paisaje regulatorio descentralizado de Estados Unidos presenta desafíos importantes para hacer cumplir restricciones de edad consistentes en todo el país. Aunque algunos estados están avanzando en la implementación de medidas de verificación de edad, aún queda mucho por hacer.
En última instancia, ambos países deben seguir fortaleciendo sus esfuerzos para proteger a los jóvenes de los daños del juego, y puede ser necesaria una mayor colaboración entre los reguladores, los operadores y las organizaciones de salud pública para crear un entorno más seguro para todos.
