CSIF exige medidas tras las agresiones a tres trabajadores en la cárcel de Estremera
El sindicato CSIF Prisiones Estremera ha dado a conocer este martes las agresiones sufridas por tres funcionarios en el Centro Penitenciario de Madrid VII, ubicado en Estremera, durante la última semana.
Los incidentes ocurrieron en los módulos 2 y 16, evidenciando, según el sindicato, la falta de seguridad que enfrentan los empleados penitenciarios en su trabajo diario.
El primer incidente se produjo el sábado en el módulo 2, cuando un interno propinó un fuerte golpe en el rostro a un funcionario, quien requirió atención médica en el mismo centro penitenciario.
Las otras dos agresiones se registraron durante el cierre de celdas en el módulo 16. En este caso, una interna intentó infringir las normas del centro, lo que desató un altercado violento. Al recibir una negativa de la funcionaria encargada del módulo, la reclusa reaccionó agresivamente, insultando y amenazando con atacar a la trabajadora.
Ante el aumento de la tensión, se alertó a los jefes de Servicio y a otros funcionarios, quienes acudieron rápidamente. Sin embargo, la interna desobedeció las órdenes y agredió físicamente a un jefe de Servicios y a una funcionaria, golpeándoles en la cara, brazos y piernas.
Gracias a la intervención oportuna del personal penitenciario, se logró controlar a la agresora, evitando daños mayores. No obstante, tanto el jefe de Servicios como la funcionaria resultaron heridos a causa del ataque.
Reclamaciones del sindicato ante el aumento de la violencia
En respuesta a estos hechos, CSIF Prisiones Estremera ha denunciado la "creciente ola" de violencia en las prisiones y ha solicitado medidas urgentes para proteger a los trabajadores penitenciarios. Entre sus demandas más importantes se encuentra el reconocimiento del personal penitenciario como agentes de la autoridad, lo que implicaría una mayor protección legal frente a las agresiones.
Además, el sindicato reclama la actualización y mejora de los medios coercitivos, adaptándolos a las necesidades actuales de los centros penitenciarios. También solicitan un incremento en el número de trabajadores, cubriendo todas las vacantes y ajustando la Relación de Puestos de Trabajo (RPT) a las necesidades reales del centro. Asimismo, exigen formación continua y especializada para dotar a los funcionarios de herramientas efectivas para enfrentar situaciones de riesgo.
"Las agresiones a funcionarios de prisiones no pueden seguir siendo toleradas ni minimizadas. Exigimos soluciones inmediatas antes de que tengamos que lamentar hechos aún más graves", concluye el sindicato en su comunicado.
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